Con decidida vocación constructiva, aprovecho la libertad que otorga la fantasía, para dialogar con los volúmenes y la materia, observando la proporción de la forma y el equilibrio. Transformo el hierro, la madera, la escayola creando objetos sensibles, utilizo la herramienta de la creatividad para materializar formas y volúmenes y convertirlos en escultura, con la finalidad de provocar un lenguaje de comunicación con el espectador.

Para desarrollar mi trabajo, abrazo todos los procedimientos que posibiliten la manipulación bien entendida de los materiales, es decir: su procedencia, la sintonía con el medio que nos rodea, las posibilidades naturales de acabados, pátinas. Hasta el arte final hace que revindique el carácter artesanal y humano del proceso constructivo. Empleo la experiencia acumulada para desarrollar nuevos procedimientos y afianzar destrezas propias, que estimulen la capacidad de concebir y producir todo tipo de objetos artísticos únicos o series limitadas, generando soluciones precisas, dando carácter creativo al producto que elaboramos.

Construir una escultura es una lucha implacable entre la técnica y el material hasta ver aparecer la obra física recortándose en el espacio. Este esfuerzo nos conduce a un resultado donde la creatividad, la técnica y la imaginación crean un vínculo espontáneo, funcional, actual, intentando en todo momento encontrar un valor humano en el trabajo artístico y en el conocimiento racional del entorno.

Esta es mi manera de concebir la escultura, proporcionando calidad humana, disfrutando del trabajo, ayudados por la tecnología adecuada, convertimos esta profesión en una actividad apasionante, creativa y dinámica.

ASOCIACIONES

MTG - Mínimo Tamaño Grande.